¿Recuerda
al joven que estaba sentado mientras le cortaba el pelo a Ud? pues él le dijo a
su mamá ‘Muy alto (el corte)’-me expresó don Solano, el peluquero-
“Mi
nombre es Víctor Isidro Solano Sánchez, soy natural de Santiago de Cao. Toda mi
familia es de allá. Nací el 14 de mayo de 1935. Mis padres, ya difuntos, son
José Rosario Solano y Soraida Sánchez. Tuve 12 hermanos de los cuales vivos
tengo 3. Mi esposa es Santos Trujillo Blas y con ella tuve 4 hijos.
A
la edad de 17 años por el año 1952 vine a trabajar a Cartavio, en esa esquina
que queda en la 2da cuadra de la Calle
Proaño y la Calle Coliseo, a un lado donde antes se había ubicado el Antiguo
Mercado (se incendió en 1948). Estuve trabajando ahí entre 1952 y 1954.
En
la zona donde es hoy el Nuevo Mercado de venta de pescado, carnes y otros
productos, en realidad fue un relleno de basural. La Hacienda (empresa Grace) trabajó
este terreno y construyó este mercado. Yo trabajaba desde muy joven para el Sr. Francisco Llerena Sánchez y cuando nos trasladaron de local vine a
trabajar aquí, a este nuevo mercado, con la condición que respetemos el
contrato y que cobremos cómodamente a la gente, para que así todos tengan
acceso al servicio de la peluquería. La atención era muy diferente en el
horario. Se trabajaba en horario partido de 8:00 am-12.30 pm y de 2:00 pm-10:00
pm”.
Tarifa donde se expone no sólo precios sino el nombre de la Asociación fundada en 1955 |
Don
Víctor Solano, es un peluquero que hablaba con mucho cuidado y al referirse del
contrato que se hizo con la empresa pasó a decirme más aún.
“…El
local de la Calle Atahualpa fue entregado a don Llerena, mientras el otro lado
frente al actual paradero Cartavio, le era dado a otro. Ese otro peluquero un
día se le animó subir el precio del corte de pelo. La Gerencia se enteró, le
llamó y lo sacó del local por el hecho de que así sea para subir un centavo se
debía llegar a un acuerdo con la Gerencia, luego comunicar a la Municipalidad.
Siempre todo por la vía legal. Es así que el Sr. Llerena aprovecha tomar el otro
local que hasta ahora lleva su nombre”.
Corte para menores de edad |
Incluso para los nenes. Pero aquí se necesita la ayuda de la madre. |
Recordando
mi niñez, por el año 1980 ya había la costumbre de ir al local del Sr. Llerena,
yo tenía 6 años de edad. Mi papá Fernando siempre nos mandaba ahí; a mis
hermanos, sobrinos y a mí. A veces era mi padre quien nos cortaba
en casa.
“Yo
he trabajado en varios lugares. Por ejemplo en Nepén, Chiquitoy, Cartavio y
Trujillo. En Nepén fui Comidero, osea una persona encargada de llevar la comida
al campo a los trabajadores. Para eso iba con un burrito.
Al
trabajar en Trujillo, mi peluquería se ubicó por la iglesia de San Agustín
donde se hallaba un parquecito y unas tiendas. Luego regresé a Cartavio.
Te
digo que el señor Llerena tenía la peluquería más famosa en Cartavio. Aquí se
cortaron a doctores del Hospital San Francisco, a los guardias, a los oficinistas
y a los ingenieros. Lo curioso es que los ingenieros no venían a la peluquería
sino que el mismo Sr. Llerena iba a sus casas.
Hablando
de corte de pelos a los jóvenes. En tiempos de Hacienda, todos hacían cola y sentaditos
enviados por sus papás. Nadie se quejaba, el corte era militar, no como ahora
que son algunas madres las que consienten tanta moda cuando aún están en el
colegio. En esos tiempos el corte de los oficinistas era cada 8 días y el de
los escolares cada 15 días. También tuve la oportunidad de realizar cortes a
descendientes de chinos como Felipe Wong (su esposa era sumaniquera) y Santiago
Wong. Tuve aún la oportunidad de conocer a un peluquero de ascendencia japonesa
de apellido Mizukami.
Cuando
se creó la fábrica Trupal (en el año 1968), corté a los señores que administraban
esa empresa.
Me
considero devoto de Santa Rosa de Lima pero además devoto de Santiago El Mayor.
Justo me ha llegado un documento invitándome a participar eso que llaman óbolo
voluntario, ya que allá en Santiago de Cao me conoce la gente”.
Hace
varios meses don Víctor Solano había estado delicado de salud por eso es que
veíamos su peluquería cerrada y varios me preguntaban qué pasaba, ni yo supe
sino cuando volví a verlo. El hecho es que ahora está de nuevo con nosotros,
listo para ser entrevistado como tiempo atrás ya le había pedido ese permiso.
“Por
ahora, a pesar que vivo en La Esperanza-Trujillo desde hace 30 años, vengo a
trabajar de lunes a domingo con el siguiente horario:
-
De
8:00 am-12:30 pm y de 2:00 pm-5:00 pm
-
Los
jueves y domingos medio día.
-
Los
feriados no trabajo”.
Esta
es la entrevista al Sr. Víctor Solano, a quien la gente joven le llama
equivocadamente “ Sr. Llerena” pero que en realidad es el apellido de unos de
los peluqueros veteranos de nuestro pueblo para quien el señor Solano, con orgullo, trabajó.
Prometió entregarnos más información sobre su biografía.
Antiguo medidor que se usaba en tiempos de la Hacienda Cartavio, donde los dueños eran los Grace |
Con lágrimas en los ojos el Sr. Víctor Solano recibe el reconocimiento, un trofeo de mármol, en manos del representante de APROBIDEC el Sr. Lennín Sánchez. Foto: Miguel Núñez. |
Fuente
oral
Sr.
Víctor Isidro Solano Sánchez.
Fotos
Prof.
Lic. Victor Miguel Núñez Bartolo.