jueves, 28 de mayo de 2020

Vicente Ferrer Mora Chimo Cápac. Alcalde indio y Cacique de Santiago de Cao



DON VICENTE FERRER DE MORA CHIMO CÁPAC

Por: Mg. Miguel Núñez Bartolo

Fue durante el gobierno de Don Diego Mache, que Santiago de Cao pasó a ser residencia de los Caciques Principales del valle de Chicama. Con el tiempo, luego de haber pasado una serie de caciques, surge la figura de María de Mora Caxahuaman, única hija sobreviviente del Cacique Principal Alonso de Mora y de su esposa Doña María Ispacoch. Como era una menor aún, su tío Juan de Mora y Ulloa se encargó del gobierno del Caicazgo de Santiago de Cao. Posteriormente, doña María que era de Santiago de Cao se casó con José de la Torre Oxahuaman (1631), quien era Cacique de Mansiche y Huanchaco, desde entonces sus descendientes van a llevar el apellido de Mora Chimo. Tras la muerte de Juan de Mora y Ulloa, ambos llevarían bajo su mando el repartimiento de Chicama.

Ilustración 1: Retrato de Don Vicente Ferrer de Mora Chimo Cápac. La frase inicial es 
idioma muchik y dice "Mi nombre es...". Dibujo de Miguel Núñez Bartolo-2018
Ilustración 2: Folleto auspiciado por la 
Municipalidad Distrital de Santiago de Cao 
estando en la gestión el Alcalde Enrique Del Campo-2018.

 
Sucedió a los esposos María de Mora Caxahuaman y José de la Torre Oxahuaman, sobre el gobierno en el cacicazgo, el hijo Luis José de Mora Chimo. Durante su gobierno se cambió el nombre oficial de “Cacicazgo del valle de Chicama” por el de “Cacicazgo de los pueblos de Santiago y Chocope”. Este noble indígena compró tierras, cultivó y gobernó áreas que correspondían a Magdalena de Cao y Quirihuac, destacando en el cultivo de trigo y las ventas de harina. Se sabe que Luis José de Mora Chimo tuvo con su tercera esposa (prima), Catalina de Mora, los siguientes hijos: José, Vicente Ferrer, Pedro Bautista y Eusebio. Es del segundo de sus hijos que rendiremos especial atención.

Junto a este valle, corre el de Chimo, el cual fue la sede de los soberanos chimús antes de la conquista incaica. Hoy todavía destacan las ruinas de Chan Chan que nos dejan una idea de la importancia de aquel dominio. En esta región fuertemente hispanizada, los «Señores de Indios» pasaron a ser, como en otras partes, caciques de pueblos de reducción: en nuestro caso, los Mora Chimo lo son del valle de Chicama, reducido en cuatro pueblos: Santiago, Cao, Chocope y San Esteban.
 
Ilustración 3: Firma del Cacique

Ilustración 4: Traje de un indio noble en el Perú.
 Similar vestimenta trajo sobre sí Vicente Ferrer
de Mora Chimo Cápac.
Dibujo de Pedro Alonso O'crowley

Desde España, en sus memoriales, él se presenta ante todo como «Procurador General de sus Indios» y luego «de los Indios del Reino del Perú y Diputado de los Caciques más principales». Al mismo tiempo, se ha presentado como «Cacique Principal de varios Pueblos de la Costa norte de Perú», en una lista que abarca desde el valle de Chicama hasta el de Chimo (Huanchaco y Mansiche), siendo este último de mayor abolengo en la tradición aborigen. En tres de estos memoriales, yuxtapone a su apellido la titulación inca real, «Cápac», mientras incorpora a menudo la partícula «de» —de Mora— como los nobles españoles.
«Procurador General», ¿significará aquí «¿Apoderado» —o sea que Vicente Mora Chimo habría recibido poderes de sus pares de Chicama para una causa concreta— o bien es de entender según las Ordenanzas del Perú de 1685, como el que representa ante las instancias reales la defensa general de los Naturales?

Algo que ha pasado desapercibido a los liberteños, es que uno de los grandes precursores en los
Ilustración 5: Virrey Cármineo Nicolás Caracciolo
reclamos contra los abusos de los encomenderos a nivel nacional nada menos fue el Cacique de Chicama don Vicente Ferrer de Mora Chimo. Este Cacique nació alrededor del año 1674 en el valle de Chicama exactamente en Chocope pero con jurisdicción sometida a la ciudad de Trujillo. Fue un indio noble del linaje de los caciques del mismo valle. Así también llegó a ser Alcalde Ordinario de Santiago de Cao en el año 1715 y Alférez de las Milicias de Naturales del pueblo. Viajó a la ciudad de Lima, capital del virreinato, en el año 1720. Allí se relacionó con caciques de diversas partes del virreinato y expuso ante el Virrey Cármineo Nicolás Caracciolo
, Príncipe de Santo Buono, los abusos cometidos por algunas autoridades contra las comunidades indígenas y sus tierras. para lo cual, salvando la vigilancia, castigos o persecuciones de las autoridades coloniales, recibió quejas de los indios de Charcas, Potosí, Azángaro, Huarochirí, Chachapoyas, y tantos sitios más. El Virrey Cármineo Nicolás Caracciolo lo nombró “Procurador y Diputado General de los Indios del Perú”, a fin que exponga sobre los agravios sufridos ante el Real Consejo Indias de Madrid.


Ilustración 6: Corregidor aplicando castigos
sobre indios que laboraban en las minas.
Dibujo de Felipe Guamán Poma de Ayala.

Entre los abusos que éste personaje ponía en tela de juicio fueron los repartos mercantiles, el apoderar de las tierras de los indios y el trabajo de las mitas y tributos aplicados abusivamente por los llamados Corregidores, autoridades políticas a cargo de un territorio denominado Corregimiento.  Estos cargos políticos fueron instaurados por el Gobernador y Capitán General Lope García de Castro en 1565; luego fueron reglamentados por el Virrey Francisco de Toledo en 1575. Los corregidores poseídos de una ambición insaciable, son tristemente célebres por aplicarle al indio el REPARTO MERCANTIL, que era la adquisición obligatoria de mercancías, en muchos de los casos inútiles y a precios exorbitantes (medias y camisas de seda, encajes, terciopelos, máquinas de afeitar, espejos, candados, mulas, paños, casinos, etc.). Esto se trata en un conjunto de productos que eran repartidos entre la población indígena, mestiza y criolla pobre, los cuales debían ser pagados en un periodo de cinco años, que era el periodo que duraba el cargo del corregidor. 
Con dicho reparto se masificó la mano de obra. El indio tuvo que buscar cualquier trabajo adicional al que realizaba en sus tierras comunales, para procurarse el dinero que le permitiese pagar el reparto. Fue tanta la codicia de los corregidores, que el abuso llegó a horrores, al punto que finalmente los indios se vieron imposibilitados de pagar sus deudas. Luego vendrían las rebeliones.
Además de lo anterior, el Corregidor en coordinación con el Cacique de la zona, explota al indio a través de la mita minera, la mita obrajera y la recaudación del tributo anual. Sus permanentes abusos fueron causa de numerosas sublevaciones indígenas a lo largo del territorio peruano, pero cabe destacarse, entre todas, a la gran revolución separatista de Túpac Amaru II, hecho que determinará su eliminación definitiva de los corregimientos hacia 1784, durante el reinado de Carlos III.

El 29 de junio de 1722 Vicente Ferrer de Mora Chimo Cápac se encontraba en La Habana (Cuba) en donde se entrevistó el ex-Virrey Santo Buono, quien se hallaba de regreso a España. El 01 de julio zarpó de La Habana. Siendo un Cacique Principal (que según leyes de Indias era equiparado con los Títulos de Castilla) fue bien recibido por la Corte y visitó sin duda el Palacio Real y el Consejo Supremo de Indias.


Vicente Ferrer de Mora Chimo Cápac a fin de dar a conocer a un público más amplio hizo publicar cuatro de varios memoriales que presentó al Rey. Dentro de una concepción fidelista no pide eliminar el orden colonial, busca en cambio, una aplicación más justa del mismo régimen. En otras palabras; se caracterizó por ser un personaje que no exigía la separación de nuestro suelo de la metrópoli española; sino más bien, expuso que las leyes solían ser las adecuadas sólo que las autoridades no las cumplían. Mora dirige su ataque a los funcionarios locales del gobierno español, al mismo tiempo reclamó por el cumplimiento de la legislación protectora del indio. Incluso, en sus reclamos hizo ver que los indígenas (mayoría poblacional durante la colonia) eran vasallos de la Corona Española, pero que aun siendo vasallos eran tratados peor que los negros esclavos. Su sentir se hizo ver en el sentido que los nativos peruanos eran como ciudadanos con derechos, que sabían expresar su sentir ante la explotación del invasor europeo y que eran personas que sabían usar su inteligencia como para diferenciar entre el buen y el mal trato a su integridad física y psicológica. Vale destacar que también se quejó de las preeminencias incumplidas con respecto a los Caciques. Don Vicente reclamaba que se les debía de tratar, incluyendo a él, como “Nobles Hijosdalgo de Castilla”, entendido como hombres que pertenecían por vínculos sanguíneos a la pequeña nobleza. Así pues, Vicente Ferrer de Mora Chimo Cápac era un rey en nuestros valles –Chicama y Moche-, aunque sometido políticamente a la Corona de España.

Una vez en la Corte de España, actúa primero como Procurador General de los Indios de «sus pueblos» —Santiago de Cao, Magdalena de Cao, Chocope y San Esteban—: logra una real Providencia para la restitución de sus tierras el 8 de julio de 1722. El Consejo de Indias insta a la Audiencia de Lima que mande a una persona competente para remediar la usurpación de las tierras de los naturales de Chicama. Desde el año 1722 hasta antes de su muerte, publicó numerosos memoriales en los que denunció los maltratos y reivindicó los derechos que la Ley, la justicia y la fe cristiana conferían a los indios del Perú. Allá en la península Ibérica preparó un documento denominado “Manifiesto de los Agravios vejaciones y molestias que padecen los indios del reino del Perú dedicado a los Señores del Real y Supremo Consejo y Cámara de Indias, por el Procurador y Diputado general de dichos indios”.

Los reclamos del Cacique de Santiago de Cao, merecieron la atención de la Corona pues se dio una Real Cédula fechada el 17 de enero de 1725, mediante la cual, se apremiaba a la Real Audiencia de Lima a que se dé una inmediata atención a los reclamos de los indios del valle de Chicama. En este batallar de reclamos y sufriendo la nostalgia de los suyos, el cacique ya enfermo murió en el Hospital General de San Lorenzo (Madrid), muerte que ocurrió en España alrededor del año 1739. Hoy, para mayor realce a su labor protector de los derechos de su comunidad, se le considera “Gran Prócer Trujillano”. Mientras Don Vicente se hallaba en España, el mando cacical era desempeñado interinamente por su hermano Don Gregorio de Mora Chimo, quien en su juventud residió en el pueblo de Mansiche. Fue el último de los Caciques que tuvo Santiago de Cao y el valle de Chicama.

Hasta antes de la publicación por el diario oficial “El Peruano” (30 de abril de 2018), se consideraba como Primer Precursor Reformista del Perú al mestizo tarmeño (Junín) Fray Calixto de San José de Túpac Inca; sin embargo, es ahora el mérito trasladarlo a nuestro héroe Vicente Ferrer de Mora Chimo y enseñarlo con orgullo a nuestra descendencia. Personaje que enaltece y llama a imitar ante los abusos que nuestras autoridades gubernamentales suelen cometer en contra de nuestro pueblo.
Ilustración 7: Un cacique indio de la nobleza, su esposa y su hijo.
Imagen en tiempos de la colonia.

Referencias bibliográficas
·         El "premio" de ser virrey: los intereses públicos y privados del gobierno virreinal en el Perú de Felipe V. Por Alfredo Moreno Cebrián y Núria Sala i Vila. 2016
·         Bulletin de l'Institut français d'études andines. Editor Institut Français d'Études Andines. 2008.
·         EL NORTE EN LA HISTORIA REGIONAL, SIGLOS XVIII-XIX. Scarlett O'Phelan Godoy; Yves Saint-Geours
·         Mercaderes y corregidores: el reparto mercantil en el Perú, 1752-1780. Autor: Sergio Bebín Cúneo
Editorial(es): 
Fundación M. J. Bustamante de la Fuente, Instituto Riva Agüero. Lima-2016
·         Aporte Cultural. Santiago de Cao. Indagaciones sobre su historia.  Juan Castañeda Murga y César A. Gálvez Mora. 2002.
·         Historiador Alberto Pinillos Rodríguez.
·         Dibujo del cronista Guamán Poma de Ayala.
·         Dibujo del Obispo Jaime Martínez de Compañón.
·         Dibujo de Pedro Alonso O'crowley
·         Retrato de Vicente Ferrer de Mora Chimo por Miguel Núñez Bartolo.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Profe lo máximo me ayudo con mi tarea gracias

Miguel Núñez Bartolo dijo...

Gracias a ti por interesarte en nuestra historia